Hoy vamos a responder a una de las preguntas que la gente se hace cuando alguien recibe una terapia de kinesiología en Valencia y sale de la consulta con uno o varios kinesiotapes adheridos al cuerpo. Seguramente has visto en más de una ocasión a algún deportista de élite en la televisión, a algún conocido o incluso algún familiar con cintas de colores similares al esparadrapo pegadas en lugares extraños para ti. Tal vez no te has atrevido a preguntar para no demostrar que no sabes para qué son.
Tranquilo, si la gente lo supiera, no tendríamos que escribir este post.
Los kinesiotapes, que no han probado eficacia alguna en ensayos clínicos, se dice que actúan sobre la fascia, que es el conjunto de membranas que separan, conectan y protegen las distintas estructuras de nuestro cuerpo. En una terapia de kinesiología en Valencia en la que queramos obtener un efecto positivo a nivel circulatorio, analgésico y neuromecánico seguramente te apliquen uno o varios kinesiotapes.
A nivel circulatorio, aumentamos el espacio subcutáneo, con lo que mejoramos la función de vasos sanguíneos y linfáticos. A nivel analgésico, disminuimos la presión sobre los receptores que están en este mismo espacio subcutáneo. A nivel neuromecánico, influiremos en cómo se realiza un movimiento y así ayudar a aumentar o disminuir el tono de los músculos.
Se ideó a mediados de los años sesenta como un vendaje que permitiese una completa libertad de movimiento, así como para evitar la congestión venosa que produce el vendaje tradicional basado en envolver la articulación para estabilizarla y darle apoyo. Pese a ser una invención de mas de cincuenta años, los kinesiotapes se hicieron populares a partir de que la voleibolista Kerri Walsh los utilizara durante toda la competición de voley playa en los juegos olímpicos de Pekín 2008.
¿Quieres conocer más acerca de los kinesiotapes? Ven a Centro-Do y te informaremos.